La gestión responsable del agua es esencial, dado su carácter limitado y su vulnerabilidad. Para salvaguardarlo, es imperativo fomentar el ahorro y restringir, para luego eliminar, prácticas irracionales.
El consumo doméstico representa aproximadamente el 15 % del consumo total de agua. Las operaciones asociadas con la captación, almacenamiento, potabilización y distribución de agua doméstica generan costos significativos para la sociedad. Además, la mayor parte del agua utilizada en los hogares regresa a los ríos afectada por detergentes y otros contaminantes, ocasionando daños medioambientales y costos de depuración.
 
La adopción de hábitos de consumo más eficientes y la implementación de instalaciones eficaces en hogares, edificios y empresas tienen el potencial de reducir hasta un cuarenta por ciento el consumo de agua potable y mitigar gran parte de la contaminación vertida en las redes de saneamiento.
Un grifo que gotea puede desperdiciar hasta 2.000 litros de agua potable al año. Del mismo modo, el uso indebido del inodoro como papelera no solo implica un derroche innecesario de agua, sino que también contribuye a que parte de los desechos termine directamente en los cuerpos de agua, generando impactos negativos.

Costumbres para ahorrar agua y contaminar menos

  • Utilizar la lavadora y el lavavajillas llenos, con la temperatura más baja posible y la dosis justa de detergente.
  • No mantener abiertos los grifos innecesariamente al lavarse los dientes, ducharse, afeitarse o fregar los platos.
  • No arrojar a los desagües sustancias que pueden ir al cubo de la basura: pañuelos de papel, colillas de cigarrillos, restos de comida, bastoncillos, preservativos, tampones y compresas.

Medidas para fomentar un consumo responsable

  • Reparar y mantener las griferías y saneamientos del hogar.
  • Comprar electrodomésticos, grifos, sanitarios, elegir modelos ahorradores, con tecnología eficiente incorporada.
  • En los hogares que tienen agua caliente central, poner contadores individuales para ahorrar agua y energía.
  • El aceite de freír y el de las latas de conserva no debe ir a los desagües, porque es muy contaminante. Es mejor echarlos en un bote cerrado a la basura.
  • Regar en las horas de menos sol disminuye las pérdidas de agua por evaporación.
  • Nunca hay que lavar el coche al lado de un río, para evitar que los detergentes se viertan directamente al agua. El gasto de agua al lavar el coche con manguera son unos 500 litros; con cubo y esponja unos 50 litros; en un túnel de lavado 35 litros.
Pero además, existe una serie de tecnologías vanguardistas que pueden aplicarse a edificaciones o diferentes procesos productivos para contribuir a una gestión sostenible del agua.

Sensores y Sistemas de Monitoreo en Tiempo Real

Los sensores avanzados ofrecen la capacidad de monitorear el consumo de agua en tiempo real. Estos dispositivos pueden estar instalados en hogares, empresas y redes de distribución para proporcionar datos precisos sobre los patrones de uso. La información en tiempo real permite una gestión más efectiva y la identificación rápida de posibles fugas o malgastes.
Las redes inteligentes, también conocidas como smart grids, aplican tecnologías de comunicación avanzada para mejorar la eficiencia en la distribución de agua. Estos sistemas utilizan sensores y medidores conectados para recopilar datos, permitiendo una supervisión constante de la presión y el flujo. Con esta información, las redes inteligentes pueden ajustar automáticamente el suministro de agua para adaptarse a la demanda en tiempo real.

Sistemas de Gestión de Demandas en Edificaciones

Las tecnologías de gestión de demandas se centran en la optimización del consumo de agua en edificaciones urbanas. Incluyen sistemas automatizados de gestión de grifos y duchas, que ajustan el flujo de agua según las necesidades específicas. Asimismo, dispositivos como los inodoros de doble descarga ofrecen opciones de descarga variables, reduciendo significativamente el volumen de agua utilizado.

Tecnologías de Reciclaje y Reutilización

Los sistemas avanzados de reciclaje y reutilización de aguas grises y pluviales están diseñados para maximizar la eficiencia hídrica. Estos sistemas tratan y purifican aguas residuales domésticas para su reutilización en tareas no potables, como riego o limpieza. Asimismo, el reciclaje de aguas pluviales captura y almacena el agua de lluvia para su posterior uso, reduciendo la dependencia de fuentes externas.

Aplicaciones Móviles y Tecnologías de Educación

Las aplicaciones móviles y plataformas digitales ofrecen herramientas interactivas para concienciar y educar a los usuarios sobre prácticas eficientes de uso del agua. Estas tecnologías proporcionan información en tiempo real sobre el consumo, brindan consejos personalizados para ahorrar agua y fomentan una mayor conciencia sobre la importancia de la conservación del agua.
 
 

Esta píldora formativa está extraída del Curso online de Manipulador de aguas de consumo humano.

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