La relación de un entrenador con los padres

No solo los niños depositan una gran confianza en el entrenador, también sus padres. Sin embargo, en muchas ocasiones, son los propios padres quienes ejercen una enorme presión sobre sus hijos, exigiéndoles por encima de sus posibilidades y haciendo que la práctica del deporte deje de ser una diversión.

En estos casos, la actuación de los padres se convierte en un verdadero problema para el entrenador. Es su responsabilidad gestionar estas situaciones y hacerles ver la importancia de que le respalden y no se inmiscuyan de manera negativa en su labor.

El entrenador y los padres de los niños deben remar siempre en una misma dirección.

gestionar bien el entorno del equipo es tarea del entrenador

El entrenador, gracias a su formación y experiencia, debe tener la capacidad para gestionar el entorno del equipo, que, en equipos de base, son básicamente los familiares.