Tipología de bandas juveniles
Existen diversas tipologías de bandas juveniles, y estas pueden clasificarse según diferentes criterios. Algunos de los tipos más comunes incluyen:
Estas bandas operan y ejercen su influencia en zonas específicas. La protección y control del territorio es crucial para su funcionamiento, y a menudo entran en conflictos con otras bandas por el control de estas áreas.
Su principal objetivo es la comisión de actos delictivos que pueden incluir robos, tráfico de drogas, y otras actividades ilegales. La obtención de beneficios económicos suele motivar sus acciones.
Formadas alrededor de una identidad cultural o étnica compartida, estas bandas buscan reforzar la pertenencia de sus miembros a un grupo específico, defendiendo y promoviendo esa identidad.
Estas bandas tienen vínculos con organizaciones criminales internacionales, lo que les otorga un alcance y peligrosidad mayor a nivel transnacional.
No todas las bandas juveniles son delictivas.
La distinción entre bandas delictivas y no delictivas es crucial al evaluar el fenómeno de las bandas juveniles. En el contexto del sistema de justicia juvenil, se requiere un análisis detallado para abordar adecuadamente las necesidades y riesgos asociados a cada grupo.
En la siguiente tabla se recogen las principales diferencias entre ambos tipos de bandas:
Es importante que los profesionales en el ámbito de la intervención con menores desarrollen la capacidad para discernir entre los diferentes tipos de bandas, ya que las estrategias de intervención deben estar adaptadas a las características particulares de cada grupo. Mientras que las bandas delictivas pueden requerir una respuesta más enfocada en la seguridad y la justicia, las bandas no delictivas podrían beneficiarse de abordajes basados en la inclusión social y el fortalecimiento de vínculos comunitarios.