Estar sentado delante de la pantalla del ordenador en la misma postura durante horas, repetir cada día determinados movimientos, utilizar mobiliarios inadecuados o desgastados y permanecer mucho tiempo en lugares cerrados o con ciertas condiciones ambientales, puede ocasionar un trastorno, últimamente muy escuchado, el síndrome de la oficina o del oficinista.

Reconocido por la Organización Mundial de la Salud como un conjunto de síntomas que afecta a muchos profesionales, este síndrome es un mal común del mundo actual. Es un fenómeno que afecta más de 50% de las personas que trabajan delante del ordenador y aumenta otros 20% de absentismo laboral, sin olvidarnos del alto porcentaje de 70% de bajas por culpa del estrés.

Los orígenes del síndrome

  • Estar demasiado tiempo sentado en la misma posición, mantener posturas forzadas e incorrectas cuando se trabaja con el ordenador.
  • Sufrir las condiciones ambientales, la climatización, iluminación artificial y falta de la ventilación o acceso al aire libre.
  • Tener una incorrecta posición de la pantalla y un inadecuado balance de los reflejos.
  • Utilizar las sillas no apropiadas o mobiliario no adecuado.
  • Soportar el ruido o el ambiente denso generado por los componentes de los equipos o por las personas que están en el mismo espacio laboral.
  • Falta de información y formación del personal en lo que se refiere a la "higiene postural" o "reeducación postural" que debe llevar a cabo en el trabajo.
  • Falta de pausas y cambios de posturas y movimientos en el trabajo.

¿Qué son molestias y dolores tardíos?

El principal problema de estos trastornos es que no suelen manifestarse inmediatamente, sino que van apareciendo con el tiempo. Los más comunes son:

Molestias oculares

Problemas de "ojo seco" se producen sobre todo por la fatiga visual, ambiente seco y la disminución del parpadeo cuando miramos mucho tiempo la pantalla.

Dolores de cabeza

Suelen ser ocasionados por los reflejos de la pantalla y la tensión ocular y del cuello.

Problemas musculoesqueléticos

Las tensiones musculares, desajustes paravertebrales, contracturas y tendinitis son las mayores dolencias del cuello, la espalda y la zona lumbar.

Molestias vasculares y viscerales

Las varices, las molestias digestivas y el estreñimiento son los síntomas de la falta del movimiento y sedentarismo.

Respiración superficial o agitada

Mayoría de los orígenes del síndrome producen también la tensión emocional y el estrés y esos se reflejan en nuestra respiración y esa, por otro lado, afecta a nuestra concentración y productividad.

Mala alimentación

Ya sabemos lo perjudicial que es para nuestra salud, pero además, combinada con el sedentarismo desencadena el sobrepeso, la obesidad, la diabetes, la hipertensión y un largo etc.

Lleva la comida preparada desde tu casa, sana y equilibrada en un tupper. Mantente bien hidratado y lleva una botella de agua siempre a mano.

Consejos para prevenir o disminuir el síndrome de la oficina

Los factores que ocasionan este mal, probablemente van a seguir estando, pero lo importante es que podemos prevenir los efectos negativos con cambios de los hábitos.

  • Tómate pausas breves o breaks
  • Ten una silla cómoda
  • Regula tu pantalla del ordenador
  • Sal al aire libre unos minutos
  • Camina mientras hables por el teléfono
  • Date masajes
  • Haz pranayama, ejercicios de respiración
  • Práctica la gimnasia ocular
  • Medita...

...Y por supuesto, haz yoga en la silla.

 

Esta píldora formativa está extraída del Curso online de Yoga para el bienestar corporativo.

¿Te gusta el contenido de esta píldora de conocimiento?

No pierdas tu oportunidad y ¡continúa aprendiendo!

Política de privacidad

ADR Formación utiliza cookies propias y de terceros para fines analíticos anónimos, guardar las preferencias que selecciones y para el funcionamiento general de la página.

Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón "Aceptar" o configurarlas o rechazar su uso pulsando el botón "Configurar".

Puedes obtener más información y volver a configurar tus preferencias en cualquier momento en la Política de cookies