Son muchos los usos que pueden aplicarse a las bases de datos. Algunos de los más destacados son:
información de clientes, cuentas, transacciones, préstamos, etc.
información de clientes, horarios, vuelos, destinos, etc.
información de estudiantes, carreras, horarios, materias, etc.
para comprar con tarjetas de crédito y la generación de los extractos mensuales.
para guardar registros de llamadas realizadas, generar facturas mensuales, mantener el saldo de las tarjetas telefónicas de prepago y almacenar información sobre las redes.
información hospitalaria, biomedicina, genética, etc.
delincuentes, casos, sentencias, investigaciones, etc.
normativas, registros, etc.
datos ciudadanos, certificados, etc.
gestión de bibliotecas, museos virtuales, etc.
reservas de hotel, vuelos, excursiones, etc.
juegos online, apuestas, etc.
En términos generales, el uso de las bases de datos supone una fuente de beneficios para usuarios particulares y empresas:
- Compartir datos: Una base de datos puede compartirse por todos los usuarios autorizados por un usuario, a diferencia de los sistemas de ficheros que estos solo pertenecen a las personas o departamentos que los usan.
- Controlar la redundancia de datos: Con el fin de evitar que se pierda o desaproveche espacio de almacenamiento que es generado cuando con los sistemas de ficheros almacenan, en distintos ficheros, varias copias de los mismos datos.
- Consistencia de datos: En el momento que se actualiza un dato que está almacenado solamente una vez, este se actualiza y de forma automática está disponible para todos los usuarios. Si se ocasiona una duplicidad, es decir, el dato aparece más de una vez pero el sistema ya conoce la redundancia, el propio sistema garantizará que las copias del dato se mantengan consistentes.
- Mantenimiento de estándares: Una de las finalidades de una base de datos es mantener estándares establecidos tanto a nivel de empresa, como nacionales o internacionales.
Esta píldora formativa está extraída del Curso online de Modelado de datos y SQL.